Ni se te ocurra echar agua muy caliente ni poner la calefacción a tope. Ese cambio brusco de temperatura puede provocar la rotura del cristal.
Nuestra recomendación es que utilices una rasqueta de plástico o que eches alcohol al cristal para quitar el hielo.
Ocúpate de llevar los limpiaparabrisas en buen estado y sustitúyelos cada 6 ó 12 meses. Cuando no están bien, rayan.
Utiliza líquido limpiaparabrisas para que no se congele el agua del depósito.
Ten en cuenta que un golpe en el cristal puede transformarse en una grieta que crece con el cambio de temperatura.